lunes, junio 26, 2006

The winner takes it all


Mientras escucho The Winner takes it all y contemplo a través de mi ventana las nubes grises que cubren el cielo no puedo evitar que corran por mis mejillas lagrimas vertidas con una mezcla de sentimientos.
Una quisiera detener el tiempo y guardar a los hijos en un momento que se eternice, pero se que esto no es posible y que tal y como he vivido ya con mis otros dos tesoros, el más pequeño tiene que echar a volar sus alas.
Se que tal vez las decisiones tomadas en el pasado no hayan sido perfectas y que como mamá hubiera querido no cometer errores, pero todos, padres e hijos, tenemos que ir aprendiendo en el camino la mejor manera de realizarnos conjuntamente.
Hoy revivo momentos que experimenté tiempo atrás cuando mis dos hijos mayores tomaron caminos para los que los fuimos preparando desde que nacieron. Pero cuando el pequeño abre sus alas y deja que sean las nuevas corrientes de aire quienes propicien su vuelo... surge una zona que parecía cerrada. Y aunque sé que es la única forma en la que ellos pueden seguir en el encuentro de si mismos, no deja de doler.
Mas he aquí que surgen otros sentimientos en donde el orgullo por lo que están emprendiendo, por la mirada llena de luz que traslucen sus ojos, la bravura para enfrentar los nuevos retos, los sueños que transforman las metas, me da la convicción de que a donde vayan buscarán siempre alcanzar aún lo que parezca imposible.
Y entonces en mi interior surge la certeza de que con esa energía para ir en la búsqueda de los sueños, con la confianza en si mismos que no los ciega ante las adversidades pero si les da el valor para enfrentarlas y superar lo que sea factible y lo que no transformarlo, lograrán ser triunfadores en lo que emprendan, porque el ganador se lleva todo!!